Drone Hopper es una ‘startup’ que ha creado aviones no tripulados para ayudar en la extinción de incendios
A 9 de julio, las cifras que daba el Ministerio superaban con creces a las de 2016. Desde el 1 de enero, en España, ha habido 7.791 incendios y ocho de más de 500 hectáreas arrasadas, 55.918,98 en total. Pero el fuego no tiene solo un coste medioambiental, también económico (público y privado) y, en el peor de los casos, las vidas que se cobra. Con estos números en perspectiva nació Drone Hopper en septiembre de 2015, una startup de aviones no tripu樂威壯
lados para complementar el mercado ya existente en extinción de incendios.
Pablo Flores (Madrid, 1978) es su fundador, un ingeniero aeronáutico que trabaja en Airbus y que está convencido de que su creación puede mejorar el sistema actual para apagar fuegos: «En ningún caso queremos sustituir, sino complementar aquello que los hidroaviones y helicópteros actuales no pueden cubrir, o que es muy costoso». Enfatiza que le da «rabia» cuando, en los grandes incendios, la extinción debe suspenderse durante la noche debido al peligro.
El dron de esta startup tiene una capacidad de nebulizar hasta 300 litros de agua en una estructura de 160 centímetros de diámetro y 50 de alto; cuenta con sistemas de control, cámaras térmicas. navegación y geolocalización de precisión para ubicar el punto exacto para la extinción; y tiene dos modos de operar, desde tierra —saliendo desde un lugar cercano al incendio— o desde el aire —el sistema puede adaptarse a diferentes aeronaves y pueden lanzarse a cierta altitud por encima del fuego—